El Camino de Santiago tiene como ruta más famosa el llamado Camino Francés, en el que confluyen muchos otros itinerarios entre los que se encuentra la Ruta de Bayona o Ruta Jacobea Vasca, que atraviesa el término mirandés. Esta vía viene desde Francia, y entra en España a través de Irún, continuando, entre otros lugares, por Andoain, Tolosa, Beasain, Zalduendo de Alava, Vitoria, La Puebla de Arganzón, Estavillo, Armiñón, Lacorzana, Miranda de Ebro, Pancorbo, Briviesca, Monasterio de Rodilla y Burgos, donde se une al citado Camino Francés hacia Santiago de Compostela.
La Ruta Jacobea Vasca fue la más importante entre los siglos X y XIII. El Camino de Santiago de la Costa se encontraba asediado por los asaltos de los bárbaros normando, y, al sur, en el territorio recorrido por el Camino de Santiago Francés, la dominación árabe era plena. Así, la Ruta de Bayona se convertía en el trazado más seguro para los cristianos que se dirigían a Compostela. Al tiempo, tanto el privilegio otorgado en el Fuero por Alfonso VI en 1099 como la conversión del trazado por parte de Alfonso VIII en Camino Real potenciaron aún más el paso de peregrinos.
Tras las conquistas de Nájera, Logroño, Cellorigo y Briviesca por parte de Sancho III el Mayor de Navarra, la Ruta de Bayona decayó en detrimento del Camino de Santiago Francés, sin que nunca haya dejado de ser utilizada.
La Asociación de Amigos del Camino de Santiago de Miranda de Ebro viene potenciando su uso; recientemente se ha procedido a la recuperación de su trazado en el municipio mirandés, y el Albergue Juvenil “Fernán González” reserva alojamiento a los caminantes.
|